El pasado 3 de marzo, la Confederación SUMADOS -Fetico, hacía entrega del premio Aequalitas a la Selección Nacional femenina de Rugby , un galardón que desde 2016 reconoce a « aquellas personas cuya capacidad y lucha por la igualdad, diversidad e inclusión ha sido destacable ».

Un cálido acto, a pesar del fría de la mañana, que tuvo lugar en el Centro de Tecnificación Río Esgueva , en Valladolid. Recogían el premio las Leonas XV , nombre con el que se conoce a las jugadoras de la selección, acompañadas por su entrenador, José Antonio Barrio "Yunque". Por parte de Fetico acudía Antonio Pérez, su secretario general y Arancha Arranz, responsable de Igualdad. Junto a ellos, Pepa Martín-Mendicute , delegada de SUMADOS en Telefónica Móviles y antigua jugadora del equipo femenino de rugby CD Arquitectura , con la que estuvimos conversando una vez finalizado el acto.

P- Pepa, la primera pregunta es obligada: ¿cómo entraste en contacto con el mundo del rugby?

R- Pues de la manera más natural, podría decir que por herencia familiar, y porque en mi casa mi padre jamás hizo distingos en cuanto si era niña o niño, para que me gustara, y ponérmelo al alcance de la mano. Disfrutábamos los dos por igual de pasar el ovoide y ver partidos juntos.

Él siempre decía que hiciera lo que hiciera diera lo mejor, para ser la mejor para mí y los demás. Algo muy propio también del deporte del rugby. Me apoyó con toda la naturalidad, y a los 14 años me abrió las puertas del CD Arquitectura a través de su gran amigo y compañero, Lino Plaza, un histórico del rugby español y claro, habiendo sido también jugador mi padre… se hacía inevitable que yo cayera en su práctica.

P- ¿Cuánto tiempo te dedicaste al rugby?

R- Menos del que hubiera querido, unos 12 años de manera continuada. Y el resto de mi vida como incondicional.

P- ¿Por qué lo dejaste?

R-Pues por la imposibilidad de conciliarlo con mi vida laboral. Además, era una época muy incipiente en cuanto a la incorporación de la mujer a un deporte eminentemente masculino…temas como encontrar tallas adecuadas o equipaciones, que a veces teníamos que compartir con distintas categorías del club, falta de seriedad en cuanto a las programaciones de los partidos de liga federada (¡cuantas veces habremos jugado sin haber arbitro designado!) etc, aunque esto también sirvió para desarrollar la capacidad de resiliencia, de adaptación y de solidaridad, que a fecha de hoy son bandera para mí.

P- ¿Qué es lo que más atrae de este deporte?

R-El rugby es un deporte donde no solo se juega con un balón a marcar en el campo contrario, es un deporte que recrea la vida misma, pero sin la hostilidad, ni la escisión de la realidad que vivimos. Es un deporte integrativo, lleno de valores, de nobleza, de solidaridad, de trabajo en equipo, donde no hay estrellas y sí un universo de diversidad y colaboración, donde desde el más bajo, hasta al más alto, es válido.

P-¿Has sufrido el machismo por haberte dedicado a esto?, ¿qué tipo de ambiente se respira?

El rugby ha mirado siempre por el colectivo, compartiendo valores principales como son el respeto, y eso hacía más llevadero el no sentir el peso del machismo, aunque siempre hubiera algún comentario desacertado proveniente de las gradas. Pero hace algo más de 25 años entrenaba con chicos a un deporte a priori masculino y no sentí miedo ni diferencia en el trato, es más, salíamos juntos y a fecha de hoy seguimos manteniendo esas amistades por efímeras que fueran, éramos equipo, ante todo.

P-Y pasando al ámbito laboral, ¿Cuántos años llevas trabajando en Telefónica, ¿cuál ha sido tu recorrido en la empresa?

R-Camino de los 25 años…pasé de entrar de manera casi casual a ser la primera operadora del antiguo Centro de Atención al Cliente de TME en coger una llamada, cuando la instauración del GSM en España; de ahí fui pasando por diferentes unidades como Red, siendo prospectora de Ubicaciones, Planta Externa diseñando FTTH, hasta la actualidad que formo parte de TOR para el proyecto Faro.

P-¿Has tenido algún problema en tu trayectoria profesional en Telefónica por ser mujer?

R-Por ser mujer con respecto al hombre no he tenido problema alguno y sin embargo sí he sufrido la incomprensión y la falta de corporativismo de las mismas mujeres. Mujeres que adoptan el rol de hombre y que actúan como un mal jefe con acerbo pseudomachista.

P-¿Qué tipo de acciones crees que se deberían llevar a cabo para trabajar en pro de la igualdad real entre géneros?

R-Es una cuestión de principios, de valores que se han de inculcar desde la infancia, que se han de reforzar en la adolescencia y permanecer implantados en nosotros cuando de adultos nos encontremos con elementos discordantes y situaciones límite. Y lo más importante, creernos que somos capaces de gestionar el cambio, saber quiénes somos, no callarnos ante las cosas que realmente sean constitutivas de agravio o segregación. Conocer, usar y exigir las herramientas que están a nuestro alcance para eliminar ciertas actitudes. No hacer oídos sordos, pero tampoco magnificar lo que se hace por costumbre, ir dando pildoritas de conocimiento al que no sabe.

P-¿Qué opinas de efemérides como el 8 de marzo?

R-Soy muy mala para las fechas, pero me parece bien estos recordatorios para ponernos en el mapa, aunque todos los días son el día de la mujer, ya que todos los días “nos ponen las calles” y tenemos que salir a enfrentar lo que está ahí fuera y ya no digo nada del añadido que tenemos dentro de nuestras casas…

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